La mejor experiencia para ver las miniseries de Netflix es de un tirón, contexto que te permite dimensionar las bondades narrativas y formales de sus apuestas visuales, en este caso de Bebé Reno. No todos podemos darnos el lujo de ver una serie sin interrupciones, pero yo aproveché mi primera semana de vacaciones y una lamentable faringitis que de alguna forma me proporcionó el tiempo apropiado. Bebé Reno fue creada, producida y protagonizada por el escocés Richard Gadd, quien reveló que para su argumento se inspiró en situaciones personales.

La apuesta de Gadd es una suerte de alegoría de los tiempos hiperconectados de hoy, mostrándonos a una generación de millennials que en la figura del protagonista trata de buscarse a sí mismo. Richard Gadd interpreta a Donny Dunn, aspirante a cómico que no ha logrado despegar o más bien no ha podido encontrar la fama que anhela. También es un sujeto torturado por determinadas experiencias, personales y familiares, quien además está en un proceso para definir su respectiva orientación sexual. Lo cierto es que Donny tiene una bajísima autoestima por donde se cuela Martha Scott (Jessica Gunning), una conversadora y robusta mujer que comienza a frecuentarlo en el bar donde trabaja. Donny encuentra en la voz y comentarios de Martha la seguridad que tanto desea, a la vez que siente cierta lástima por una mujer que probablemente ha sido rechazada e ignorada por muchos. Sin embargo, es aquella lástima la que posteriormente se transformará en una dependencia.

Martha Scott nos recuerda en algo a la Annie Wilkes de Kathy Bates en Misery, mientras ésta torturaba al escritor Paul Sheldon, personaje interpretado por James Cann. Sin embargo, Scott es un poco más centrada que Wilkes, si bien ambas comparten características obsesivas y antecedentes policiales. Jessica Gunning interpreta a una persona que por medio de las RRSS alimenta sus fantasías, por más burda que éstas sean. En Donny detecta la oportunidad para ejercer cierto control matriarcal, a la vez que sus ataques de ira nos van mostrando una mujer totalmente ajena a los convencionalismos de la realidad. Ahora bien, lo que produce una fascinación en torno a Bebé Reno es justamente la fragilidad emocional de Donny, la que además está unida a Teri (Nava Mau), su fijación y revelación sexual, pero también el símbolo de su respectiva incapacidad para definirse. De alguna forma, el personaje de Martha es un catalizador de los deseos, fobias, pesares y tristezas del atribulado Donny.

Lo interesante de Bebé Reno, visto desde mis casi 45 años, es que justamente nos permite comprender parte de las motivaciones de los millenials, que en la figura de Donny nos revelan parte de sus intereses en torno a experiencias, contextos y situaciones. Tanto Martha como Donny son individuos amortajados por sus miedos, a la vez que son resolutivos y algo pragmáticos. Todos los capítulos de la serie, finalmente, son la conformación de la personalidad de Donny, transitando desde un ámbito con muchos deseos a otro en donde la ingenuidad del personaje pasa a un estado de absoluta perplejidad, y que termina convirtiéndose en una confesión en medio de un show. Es en este momento en el que Donny revela las tristezas detrás de la cara feliz del payaso.

El fenómeno de las RRSS también queda patente a lo largo de la miniserie, mostrándose como un espacio en donde acosadores y obsesivos pueden hacer cualquier cosa. Cada capítulo nos plantea la pérdida de la individualidad haciendo posible que mensajes con amenazas, elogios y comentarios triviales se vayan transformando en el podcast de la vida de Donny, quien llega hasta el punto de clasificar los estados anímicos de su acosadora. Desde otro punto de vista, expresa aquella necesidad, casi mezquina y enfermiza, de poder vincularnos con lo más absurdo, peligroso y extraño, sin medir consecuencias. Donny ve en Martha tanto una amenaza como una representación de la soledad y desorientación que él suele experimentar.

Bebé Reno es comedia negra de la mano de notables interpretaciones, destacando la bipolaridad de Jessica Gunning, a quien seguramente la veremos pronto en el mainstream hollywoodense. Estamos ante una miniserie que nos conecta con los intereses, preocupaciones y dolores de las nuevas generaciones, pero también con su tremenda ingenuidad y desorientación, atributos que son la presa perfecta para muchos tipos de depredadores. Richard Gadd creó un producto audiovisual de nuestros tiempos, a la vez que expresa el anquilosamiento de una sociedad extremadamente individualizada y solitaria en el espectro de las redes sociales, un lugar en donde todos pueden expresar sus anhelos, miedos y preocupaciones, y también sus propios horrores.

Título original: Baby Reindeer / Creador: Richard Gadd / Intérpretes: Richard Gadd, Jessica Gunning, Nava Mau, Michael Wildman, Danny Kirrane y Nina Sosanya / Año: 2024.